El pozo y la ventana al cielo
El pueblo cayó en el pozo profundo y ha luchado por retornar a la vida, sin embargo, el brocal del pozo está hoy en día más difícil de alcanzar.
El pueblo caído solo distingue el día y la noche en el círculo que encierra el brocal.
Siente en su maltrecho cuerpo la lluvia y la humedad, el calor del sol y el frío de la madrugada, el hambre y la desnutrición.
Su mayor fortaleza la voluntad de subir y alcanzar el lejano brocal y emprender una nueva vida acorde con el siglo del conocimiento y la tecnología a la cual no tiene acceso.
Roberto Carpio Nicolle
